¿Cómo te pintas ?

Hay toda una tradición en tratamientos de una vivienda de la parte exterior a una interior.

Desde el tipo de revoque, la aislación hidrófuga y la composición de la pintura.

La pintura es a grandes rasgos un adhesivo, diferentes tipos de cargas aunque la mayor parte es Carbonato de Calcio y agua. Normalmente el 50%.

La cal, también es  Carbonato de Calcio y por eso se la uso y se la usa como pintura.  Además es desinfectante. Dependiendo del tipo de cal puedes obtener pinturas excelentes. También  permite respirar a la pared.

Con la aparición del Látex (Vinilo), la utilización  de las pinturas en polvo  se dejó prácticamente en desuso. El Látex es reemulsionable. Toma humedad y la larga. Tiene una textura agradable y permite infinitos colores. Es ideal para interiores.

En la parte exterior se utilizan pinturas formadoras de película (mal llamadas impermeabilizantes) para repeler el agua. Lo más difundido es el Acrílico. No se re emulsiona una vez seco y tiene un brillo propio que da una terminación ideal.

Todas las pinturas son rígidas. Se le adicionan diferentes tipos de elastizantes  según el uso  pero después de un tiempo el producto químico migra y la pintura  se cuartea.

Cuando el contenido de acrílico de una pintura supera el 30% se denomina Techado Acrílico.

Cuidado con las pinturas mixtas con acrílico en interiores pues baja la permeabilidad  y provocan condensación. Las satinadas se expenden como lavables  e ilusionan por la fácil limpieza. Por lógica no respiran.

Antes de pintar o empapelar  fíjate como funciona tu casa  con respecto a  la humedad.