Los primeros errores
Todo material en contacto con la tierra absorbe humedad de la misma.
Los cimientos en ladrillos se realizan sobre una base para mayor sustentación (zapata), disminuyendo luego gradualmente hasta alcanzar lo 30 cm. Todo esto bajo la tierra.
O sea que recibe humedad.
Los buenos albañiles seleccionaban los ladrillos más oscuros, de mejor cocido o cochura para este fin. No solo son más resistentes, también absorben menos humedad...
No se si hoy sucede lo mismo.
Generalmente realizamos las bases en hormigón, viga de fundación o platea.
Caemos en el error de considerar impermeable al hormigón. Lo seria si se cuidaran los dosajes y la calidad del árido. También el tipo de cemento.
Como no se ve se supone que no es importante. Cualquier aditivo viene bien. En general pocos funcionan bajo tierra.
Ahí comienza la humedad de los cimientos.
Hay que considerar que nuestros ladrillos son malos. Hechos artesanalmente. Con mala cocción (baja temperatura) y llenos de poros.
A nadie se le ocurrió tratar esos ladrillos antes de colocarlos. Se ahorrarían futuros dolores de cabeza.
Por supuesto que colocar ladrillos de maquina, de mejor calidad seria bueno: Pero más caro. Y como nadie lo ve…
Todo error se cubre con el cajón contra humedad. Un simple espesor de concreto que queda en manos del albañil. Pocos son los profesionales controlan como esta hecho.
Y no se imaginan la cantidad de veces que se acuerdan una vez que esta levantada la pared. Muchas veces no hay continuidad con las carpetas del contrapiso.
Ahí tenemos mas humedad futura.
Son tan comunes estas fallas que la reparación de la humedad de los cimientos es un trabajo muy solicitado.
Partamos de unos conceptos. Tanto los materiales de construcción como las mezclas que están uniéndolos tienen agua en una etapa de su elaboración. Al migrar esa agua deja una determinada cantidad de poros. Los poros más pequeños se intercomunican formando capilares. Debido a la tensión superficial de los líquidos el agua sube y aparece en la superficie. En los planos bajos de las paredes. En las fisuras de las carpetas debajo de los pisos.
Porque no impregnar los ladrillos con los líquidos de reparación de humedad de cimientos. Son de bajo costo y forman cristales que sellan capilares y poros.
Debemos ser mas cuidadosos con los materiales que tienen poros o con las mezclas que contienen agua que al evaporarse también los forman. O sea cuidar
Los primeros errores
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