Yo soy el agua
Soy la molécula más conocida y fácil de recordar, H2O
Tengo tres estados y en cualquiera de esos tres soy a veces impredecible.
Puedo ser amiga de muchos y también muy destructiva.
Me encanta viajar hasta por el espacio exterior.
Pueden vivir en mi interior. Doy vida a los humanos y también llevo a las bacterias que los destruyen.
Sirvo como disolvente y reactivo de los materiales con que construyen las viviendas. Les cuesta mucho erradicarme después y defenderse de mis propiedades físicas.
Formo parte de la alimentación y del sistema refrigerante de sus cuerpos. Si sus techos y techados no están bien hechos entro como lluvia. Si sus cimientos y carpetas fallan me introduzco por debajo. Formo ríos y arroyos subterráneos que inundan sus sótanos. Deterioro las medianeras y penetro por las fisuras.
Muchas veces no me detectan porque soy invisible en estado gaseoso y arruino ropa, zapatos y muebles. Alimento hongos que se comen sus pinturas de pared, libros y adhesivos de papeles. Ablando revoques, cielorrasos y destruyo maderas de piso o cerramientos.
Soy capaz de quebrar los frentes de piedra cuando me congelo y en forma de nieve hundo los techos con mi peso.
No se dan cuenta de que siempre trato de viajar por el aire y a veces por protegerse de mi me cierran las salidas. No reconocen mis caminos y mis leyes. Pero soy perfectamente controlable salvo cuando otras fuerzas me generan en tormentas, inundaciones y tsunamis. Pero siempre busco mi nivel.
Yo soy el agua
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